Acabo con mi interés, por otro lado déjà vu, de refutar la 'leyenda negra' de que Debian es para expertos, hablando ahora sobre la instalación de Debian, y cómo ponerlo ‘a punto’. Porque es muy fácil. En primer
lugar, se instala igual que cualquier otra distro, así que no me voy
a extender mucho en esto. Solo decir que lo mejor es instalar conectado a
internet por cable (red eth0).
¿Por qué? Pues por una razón muy sencilla: nada más iniciarse la instalación, el sistema busca reconocer conexiones a internet. El controlador de red eth0 es universal, y siempre se reconoce. En cambio, en las conexiones inalámbricas (wifi) el controlador depende de la marca y modelo de tu tarjeta wifi, que podría estar activado por defecto… o no. Si (al inicio de la instalación) te la reconoce, pues estupendo. Pero si no, en el mejor de los casos te pedirá que busques y pongas en un pendrive una serie de archivos específicos para poder reconocer esa tarjeta, etc... y te puedes meter en un pequeño lío.