Mejorando las imágenes

Me refiero a mejorar la nitidez o resolución de alguna foto o imagen que tengas. Ultimamente ha aparecido algún programilla (‘aplicación’) que, basándose, según dicen, en algoritmos de IA (Inteligencia Artificial), prometen hacerlo. Ya se que (sobre todo en las ‘Stores’ de los smartphones) hay muchos filtros, y utilidades, para mejorar o personalizar (particularmente) los selfies, y que esto de la edición de imágenes es todo un mundo… donde yo, eventualmente, y a través de GIMP, he metido las narices, pero hoy quiero referirme a dos nuevas utilidades muy similares, llamadas Upscaler y Upscayl que hacen lo indicado: mejorar la resolución (nitidez) de una foto.

¿SWAP... o No SWAP?

Estoy confuso. Uno de los principales ‘fundamentos’ que, de toda la vida, debías conocer para instalar Linux era aquello de crear una partición para la memoria de intercambio, o SWAP, de manera que 'lo normal', en Linux, siempre fue crear 3 particiones: una para el sistema ('root'), otra, para tus archivos y configuraciones personales (la /home) y otra, pequeña para el intercambio, o SWAP.
Y es que siempre se dijo que 'la memoria virtual' (que se podría llegar a utilizar como complemento de la RAM para facilitar (acelerar) el disponer ‘a mano’ los procesos en uso) era mucho más rápida si el intercambio se hacía ‘vía partición’ (la partición SWAP), que 'vía archivo de sistema', como hace tradicionalmente Windows con su ‘archivo de intercambio’ (pagefile.sys, creo que se llama), que lo genera en la propia partición principal (C:\)

Pero ahora resulta que, con el aumento de tamaño de las RAM (o porque, en el fondo se está intentando ‘confluir’ con Windows) algunas distros empiezan a recomendar que no es necesario tener una partición de intercambio, la SWAP, que basta tener, como el Windows, un ‘swapfile’… y santas pascuas.

Quitar fondo a imágenes, con REMBG

En esta entrada quiero homenajear al - para mi admirable - blog ‘Un bruto con Debian’, que veo que, desde julio, ha dejado de publicar nuevas entradas. En cierto modo lo comprendo, porque Carlos Aranda (de ‘nick’ Litos523) ‘se obligó’ a escribir una entrada a la semana, y lleva así mucho más de 10 años, que yo ya ‘aprendía’ en su Blog cuando empecé este… y son muchos años. Pero bueno, aunque todo el mundo tiene que tener clara la idea de 'cuándo plantarse' y cuándo decidir aquello del 'hasta aquí hemos llegao...' confío en que lo retome algún tiempo más, siquiera, como yo hago, ‘por hobby’, esto es sin ningún compromiso u obligación, escribiendo solo ‘cuando te lo pida el cuerpo’.

Visión general (Sumario) del Blog

Para echar un vistazo al contenido global, quizás lo mejor es consultar el Sumario del Blog, que es lo que (más abajo) adjunto, enlazando, además, cada tema, para su fácil acceso.

Pero para para ver las últimas entradas de este Blog no tienes más que 'bajar' un poco, con la rueda del ratón (eso que llaman 'hacer scroll') y ordenadas cronológicamente, pueden verse las entradas de los últimos 18-24 meses, aquí
 

Otra manera muy sencilla de encontrar, en este Blog, lo que te interese, es usando el 'gadget'  'Buscar en este Blog', que tienes a tu derecha, introduciendo palabras-clave.

El TAG del Linuxblogger

Leí hace unos días en LinuxAdictos su aportación al reto lanzado desde otro de mis 'blogs de cabecera', de consulta diaria, el blog DesdeLinux, dirigido a los 'linuxblogger' o sea, a los que tengamos algún blog con contenidos de Linux, para que nos mostremos públicamente, y así conocernos mejor. La idea se llama ‘El TAG del LinuxBlogger’ y en esta página se explica el origen de la idea y se plantean las preguntas a las que debemos responder (nuestro ‘TAG’), para conocernos un poco más, como miembros de una comunidad de intereses afines.
Debo decir que la idea surge en el (para mi) ‘otro lado del charco’, y que esta iniciativa sería raro que naciese ‘en España’, que somos, en general, menos ‘abiertos’. Pero los muchos años de relacionarme, a través de los viejos Foros, con buenos e inteligentes amigos ‘virtuales’ hispanoparlantes (mexicanos, chilenos, argentinos, venezolanos… y también cubanos, peruanos, ‘ticos’, uruguayos… y etc, etc... y etc) me hace especialmente sensible a ‘abrirme’.
Y es que, además, uno se 'humaniza', y así como hace unos meses me apeteció sustituir mi viejo y clásico avatar por mi foto, hoy doy a conocer algunos ‘secretos’ que nunca había desvelado… que, con el paso del tiempo, parece que 'el cuerpo' me pide hacerlo. Así que vamos allá…

No news... good new

O sea, ‘si no hay noticias… es buena noticia’. Si porque, desde mediados de junio de este año, no había escrito nada para ‘cómo ser debianita... y no morir en el intento’ y la razón es que, aparte de que en verano uno dedica menos tiempo a la informática… la verdad es que tengo muy pocas cosas que contar, mi Debian funciona perfectamente y yo ya he llegado a un punto de estabilización en el que siento que estoy muy a gusto con lo que tengo, mis Apps, mis Herramientas y mis Scritpt… y no me apetece nada comerme el coco con nuevos retos.

Acelerar las descargas del aMule

Esto que escribo hoy es un perfecto ‘dèjá vu’ de lo que escribía aquí mismo hace año y medio, pero es que entonces me enrollé mucho dándole vueltas a los scripts, bucles y cosas así, y creo que vale la pena dejar las ideas claras, y sobre todo concisas, sobre como acelerar las descargas de aMule. Por cierto, dejo a un lado aquello, famoso, de la ID baja o alta, que no se si algún día lo había comentado pero que, si no es así, lo haré en alguna ocasión próxima.

Porque aquí me voy a referir, como fondo de la cuestión, a que descubrí que, cuando arrancas el aMule, en los primeros minutos de funcionamiento ‘engancha’ con bastantes ‘pares’ y va como una moto, pero al cabo de unos pocos minutos (digamos que entre 2 y 5) se ralentiza y, en principio, ya va a su habitualmente lenta (respecto a otras aplicaciones, como QBitorrent...) velocidad de crucero. Y entonces el truco es sencillo...

ShotCut, Parte 5: Introducir textos

Decía yo, al principio de esta serie, que para no complicarnos mucho siempre podíamos crear un texto, con el color, tipo de letra y tamaño, y fondo que queramos, convertirlo en imagen (en LibreOffice-Impress, con exportar, pero valdría, simplemente, haciendo una captura de la pantalla) y, ya como clip de imagen, incorporarlo, como queramos, en un proyecto de ShotCut.

Pero ahora vamos a ver que todas estas cosas se pueden hacer desde el propio ShotCut… y que, además, el programa permite hacer ‘algunas cositas’ complementarias. Así que vamos a ello…

ShotCut, Parte 4: Ajustes visuales

Todos conocemos (y no hace falta ser un experto en Photoshop, o Gimp), que las imágenes y fotos son fáciles de ajustar visualmente, mejorando su luminosidad, brillo, contraste... etc, etc. En el caso que nos ocupa, por supuesto que los clips de imagen que queramos incorporar a un proyecto de ShotCut se pueden tratar de mejorar, previamente, con casi cualquier visor de imágenes (por ejemplo yo uso el visor del Shotwell que ofrece, de forma sencillisima, poder aplicar algunos ajustes como exposición (luminosidad), contraste, matiz, temperatura…), y otros.

Sin embargo, cuando se trate de mejorar (‘hacer ajustes visuales’) un clip de video, de, por ejemplo, 24 frames (o sea, imágenes) por segundo… es evidente que ese no puede ser el camino. Pero ShotCut (y, como dije, Avidemux, y supongo que todos los editores más o menos ‘pro’ de video) tienen herramientas preparadas para estos ajustes, incluso para mucho más… usando, de nuevo, los famosos Filtros.
Así que voy a meter las narices sobre lo que ofrece ShotCut al respecto…

Los muros de pago ('paywalls') y el Firefox

Ahora que la gente ya no compra tantos periódicos como antes, sino que (y en extremo…) los lee por internet, o en el bar... los grupos editoriales han optado por empezar a imponer, también, el famoso ‘pay per view’. Es decir que, en la edición digital de un periódico, te ‘capan’ algunas noticias, o los artículos de sus mejores columnistas, de manera que no puedes acabar de leerlo… porque para poder hacerlo necesitas estar abonado a una tarifa de lectura libre (por un mes, por un trimestre…). Y a esto es a lo que, al parecer, se le llama, técnicamente, un ‘Paywall’ (muro de pago).
La verdad es que estas tasas por poder leer completo, desde tu ordenador, tu periódico favorito, no suelen ser excesivamente caras (sobre todo si las refieres ‘por día de disponibilidad para leer’), aunque el problema es que, en esta ‘Era de las Comunicaciones’, donde tienes acceso por internet a muchos periódicos, te apetece ‘picotear’ cosas de todos ellos y claro, si hay que abonarse a todos los ‘paywalls’… la ruina puede ser memorable.
Pero Firefox sale al rescate…

ShotCut, Parte 3: usando algunos filtros...

Esta tercera parte de mis primeras experiencias con ShotCut va a ser un ‘potpourri’ de pequeños trucos, o facilidades, para hacer ciertas ‘personalizaciones’ en los montajes de clips, que he ido encontrando. Y es que, por Youtube, circulan algunos tutoriales sobre cómo trabajar con ShotCut… y siempre es bueno echarles en vistazo.
(Aunque debo decir que yo, personalmente, odio los tutoriales hechos en video: que si, que será una técnica muy 'de estos tiempos', y posiblemente muy satisfactoria para el que lo cree... pero es muy incómodo para el que quiere aprender, y no solo porque ‘en papel’ es mucho más fácil anotar, subrayar, repasar, o ir solo a lo realmente importante sino porque (desgraciadamente) más de un ‘youtuber’ prepara muy mal sus presentaciones… y se enrolla terriblemente para decir muy poco (o casi nada), lo cual es un verdadero coñazo para el que pretende captar, con rapidez, algún concepto básico. Y es que no es fácil ser didáctico: en realidad, es todo un arte...)
Pero al loro... que claramente me he salido del tema...

ShotCut, Parte 2: montajes y efectos de transición

Metido a ‘destripar’ un poco (como dije, a nivel de aficionado, claro) el programa de edición de video Shotcut, quizás un uso muy común del mismo sea su utilización para agrupar (artísticamente) imágenes, y/o textos, pequeñas películas, fondos musicales, etc, y hacer un buen montaje, en video, de este conjunto de ‘clips’. Vamos, más o menos lo que yo siempre he hecho con Openshot, y antes con otros programas de Linux o Windows… incluyendo lo de pasar a video las presentaciones hechas con el (famoso...) PowerPoint.
Así que hoy vamos a ver esta primera utilización del ShotCut, y el partido que se puede sacar de ello.

Edición de video, con ShotCut (1-Introducción)

Hace unos días, a propósito de haberme descargado una peli, que creía mejorable en cuanto a luminosidad, contraste… y todos estos aspectos visuales, estuve buscando qué alternativas tenía, a través de mis queridos FFMPEG, y Avidemux, de los que he hablado más de una vez en este Blog, y que me son muy útiles… pero en ese aspecto concreto de edición de video no veía claro, de entrada, cómo poder ‘meter mano’.

Entonces, googleando, me topé con otra gran aplicación de edición de video, que se llama ShotCut… que incluso, para no tener que instalarla, se ofrece también como AppImage… y me apeteció echarle un vistazo...

Renombrar archivos (con 'rename')

Hace 4 años creé una entrada al blog, titulada ‘Renombrado masivo de archivos’, donde daba algunas ‘recetas’ para cambiar, por lotes, el nombre de archivos, tanto por consola (con un vistazo rápido a ‘rename’, que, por cierto, es un paquete (al parecer una extensión Perl) que requiere instalación) como con una utilidad gráfica, que se llama GPrename y que todavía anda por los repositorios oficiales de Debian.
Ahora me apetece dar una vuelta de tuerca al tema y, como lo del GPrename me da pereza, porque creo recordar que era un poco lioso, husmeando por Google para resolver un caso específico, que es el de cambiar ‘parte del nombre’ de muchos archivos… me topé de nuevo con el famoso ‘rename’… que me apeteció ‘explorar’, porque cada vez me vuelvo más ‘conceptual’

Czkawka

Este nombre tan raro, Czkawka, que en polaco significa, al parecer, ‘hipo’, es, sencillamente, un programita, naturalmente polaco, gratuito, de código abierto, escrito en Rust, que parece ser que es un lenguaje de programación orientado a objetos patrocinado por Mozilla, multiplataforma (o sea, vale también para Windows y para Apple), que se ofrece tanto con un CLI (‘Comand Line Interface’), como con un GUI (‘Graphical User Interface’) en GTK3, super-rápido y sin anuncios… y que usando, al parecer, avanzados algoritmos, se especializa en la búsqueda y eliminación de archivos innecesarios que (por varias causas) pueda contener un PC. Y desde la versión 4.0, que acaba de salir, lo tienes, ya, en español. Y además de ofrecer todas estas maravillas… resulta que Czkawka ni siquiera hace falta instalarlo.
Así que me prometí, hace un tiempo, echarle un vistazo… y estos son mis ‘apuntes tácticos'.

Debian 11 Bullseye y los escaneos con HP

Voy a contar una pequeña historia: la historia de cómo resolví los problemas de escaneo, en Debian Bullseye, con mi impresora HP. La verdad es que yo siempre he usado impresoras HP, así que aquí no puedo referirme a otra cosa que a esto.
Pues bien, resulta que cuando instalé Debian 11 BullsEye ya detecté problemas con ‘simple-scan’ (que todos sabemos que es el sencillo (pero suficiente) paquete de escaneo que Debian instala por defecto en Cinnamon y en varios entornos más), y el escaner de mi impresora, que es una sencilla HP Envy serie 4500 (pero, para mi, también ‘suficiente’).
Y es que, cuando instalé Debian 11 ‘BullsEye’, descubrí que, al parecer, se había integrado CUPS en algún metapaquete, y también que en el ‘tasksel’ ya no aparecía la opción de marcar que se instalase el ‘servidor de impresión’. Igualmente, me pareció entender que había cambiado la titularidad del soporte oficial de simple-scan. Y, para colmo, también me parecía que iba bastante más lento. Como uso tan pocas veces el escaner, la verdad, lo dejé pasar, pensando que ya se arreglaría. Pero no...

LibreOffice... un viejo amigo

Acabo de leer un artículo sobre el avance de LibreOffice, y su ‘gap’ positivo actual sobre la ‘suite’ de la que procede, aquel famoso OpenOffice que tan agitada vida ha tenido desde entonces. Así que estoy encantado de mi vieja decisión de pasarme al LibreOffice, en cuanto salió… aunque me avergüenza recordar que una de las razones del cambio fue ‘porque me gustaban mucho más sus iconos’.

A lo largo de este Blog he hablado bastante de LibreOffice, cómo personalizarlo, sus principales trucos (‘quitar saltos de linea’, atajos de teclado...), como instalarlo (hasta desde paquetes ‘snap’, o ‘flatpak’), etc. Pero ahora me apetece ‘darle una vuelta’ al tema de cómo poder disponer de esta imprescindible aplicación, en tu PC.

Pequeños grandes inventos para Nemo

Como decía (creo que) Groucho Marx, «hay que saber conformarse con las pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna...» Así que hoy, al hilo de este chiste, me apetece hablar de unas pequeñas grandes cosas para Nemo. Bueno, o para Nautilus, que es su padre (más o menos putativo). Desconozco cómo se haría en los ‘navegadores de archivos’ de otros entornos, yo siempre he usado (incluso instalándolo, cuando no aparecía por defecto, porque me encanta)... Nemo.
Y el caso es que, puesto a ir personalizando cosas, tras la reciente reinstalación desde cero de mi Debian, y mi reciente descubrimiento de los ‘PDFs híbridos’, se me ocurrió montar algunas cositas para que aparezcan en el menú contextual de mi Nemo (o sea, cuando das un ‘botón derecho ratón’ sobre un archivo), que vamos a ver ahora...

Always look on the bright... side of life…

Tu ru... turu turu tu ru... O sea, ‘al mal tiempo, buena cara’… que siempre hay que mirar el lado positivo. Porque este fin de semana ha ocurrido un cataclismo en mi PC, No se la causa… y lo único que queda es poner optimismo y mejorar mi conocimiento abordando el desastre. Y es que, puesto en plan ‘conspiranoico’, ya pienso hasta que haya sido un ciberataque. Es que, estos días, están bombardeando mis Blog añadiendo comentarios ‘raros’ (hasta en chino) que, naturalmente, borro… pero que siguen entrando. Total, que (y así aprovecho para decirlo aquí) he tomado la decisión de, durante un tiempo, bloquear la posibilidad de que un visitante pueda introducir algún comentario en el Blog… a ver si se olvida de mi ‘el graciosillo’.

Bueno, siendo más realista, a lo mejor es un virus raro, o es un problema derivado de una limpieza a fondo con BleachBit (del que una vez leí que es peligroso usarlo a lo burro) aunque lo más simple, que siempre suele ser lo más probable… es que haya sido un problema de ‘exceso de confianza de usuario que se cree con suficiente experiencia como para dar alegremente al Enter… sin pararse a pensar en lo que va a hacer’. Pero lo dicho: veamos el lado positivo, y aprendamos del fracaso...

Usar archivos PDF híbridos

Siempre he sido un ‘ferviente usuario’ del formato PDF, porque, aparte de que es un formato universal para documentos, que puedes leer con cualquier visor de PDFs, se abre bastante más rápido que los documentos originales de la suite informática. Así que, toda la vida, mis documentos de consulta (tutoriales, guias de configuración, ‘howto’s…’, cuentas o presupuestos, etc, etc.) los he estado guardando en su formato original (documento de texto, hoja de cálculo…) y en muchas ocasiones en formato PDF… del que creaba, a menudo, un enlace directo para tenerlo a mano, en el Escritorio, dentro de la carpeta ‘Mis enlaces favoritos’. El problema es que, cuando me tocaba corregir, ampliar o cambiar algo, tenía que ir al archivo original, hacerlo, y volverlo a exportar como PDF, sustituyendo al antiguo.

Hasta que ahora (tonto de mi…) acabo de descubrir que LibreOffice ofrece la posibilidad de crear archivos PDF ‘híbridos’… que pueden facilitar mucho el almacenamiento y mantenimiento ‘activo’ de los documentos.

Añadir un audio al Blog

Un bloguero siempre podría publicar cualquier audio genérico en su Blog, pero yo aquí quiero referirme, en particular, a añadir al Blog el audio del propio contenido, leído, de la ‘entrada’ del mismo. Es que he visto que algunos periodistas (y ellos son, al fin y al cabo, blogueros, solo que ‘profesionales’) acompañan su artículo, o columna, en los diarios digitales, con ese audio y queda muy bien, porque cuando le echas un vistazo, el acto de leer un artículo, a la vez que lo oyes, lo hace más entretenido (o menos aburrido, vamos...). Y además, para el autor, es un bonito ejercicio personal para ‘entrenar’ su voz.
Hace tiempo que lo probé, y es momento de centrar ideas de cómo logré hacerlo con mis escasos conocimientos de edición de sonido... y sin emplear ningún programa especializado (que sin duda lo haría más ‘profesional, claro). Así que aquí va un ‘how to’ del proceso, para que quede como apunte, por si se me olvida… porque quizás lo haga, aunque esporádicamente, que soy de la opinión de que ‘subrayar mucho es como no subrayar nada’.

¿Hay vida después de Debian...?

La respuesta es, evidentemente, SI. Pero debo aclarar que la pregunta era personal, que lo que me 'auto-pregunto' es, en realidad, si habrá vida después de ‘mi’ Debian, es decir, detrás de mi relación cotidiana con Linux (la distro Debian) que tengo instalada. Y entonces me asalta la duda porque lo cierto es que me he acomodado tanto a su uso que tengo la impresión de tener el mismo ‘feeling’ que los usuarios de Windows, que viven felices en su mundo Win y no se preocupan de más. Vamos, poco menos que lo del Mundo Feliz, de Huxley…

El navegador Brave en Debian

Hoy, supongo que con bastante retraso, porque la verdad es que ya estoy tan acomodado (y cómodo) en mi Debian que apenas me preocupan las novedades, he descubierto el navegador, o browser, ‘Brave’. Brave es un proyecto muy reciente (de finales de 2019), está basado en Chromium, es multiplataforma y, al parecer, ofrece características muy apreciables en cuanto a velocidad, ocupación de recursos, y seguridad/privacidad. Se puede echar un vistazo a sus prestaciones visitando su propia web.

Hombre, yo no creo que lo cambie por ‘mi’ Firefox (hoy, ya, por la versión 96.0.2) pero me apetece probarlo. Así que voy a hacer unos pequeños apuntes sobre cómo usar este ‘Brave browser’